La Cumbre sobre el Clima de Brasil destaca el auge de los vehículos eléctricos en China

0
6

La elección del transporte por parte de los líderes mundiales que asistieron a las conversaciones sobre el clima COP30 en Brasil envió un mensaje claro: la nación más grande de América Latina mira cada vez más a China para sus necesidades de vehículos eléctricos (EV). Mientras el presidente Luiz Inácio Lula da Silva llegaba en un Chevrolet, la gran mayoría de los demás delegados fueron transportados a la conferencia en vehículos eléctricos e híbridos chinos, lo que indica un cambio más amplio en el panorama automotriz de Brasil y sus alianzas estratégicas.

El dominio de China en el mercado de vehículos eléctricos de Brasil

La prevalencia de los vehículos eléctricos chinos en la cumbre COP30 subraya una tendencia notable: las incursiones sustanciales de China en el sector automotriz de Brasil. Los vehículos eléctricos se consideran esenciales en el esfuerzo global para combatir el cambio climático reduciendo la dependencia de los combustibles fósiles y eliminando las emisiones. Sin embargo, si bien los fabricantes de automóviles europeos y estadounidenses han enfrentado desafíos en la transición a la producción de vehículos eléctricos, China ha establecido una posición dominante, ofreciendo vehículos eléctricos avanzados a precios competitivos. Esto ha hecho que los automóviles chinos sean particularmente atractivos en los países en desarrollo, incluido Brasil, donde el costo es un factor importante.

Un cambio estratégico en el panorama automotriz de Brasil

La decisión de Brasil de utilizar vehículos eléctricos chinos para la cumbre pone de relieve algo más que la asequibilidad. Refleja un realineamiento estratégico más profundo, lo que demuestra que Brasil tiene asociaciones alternativas más allá de Estados Unidos, particularmente en el ámbito de las tecnologías climáticas. La ausencia de Estados Unidos en la COP30, debido a la ausencia del presidente Trump, acentuó aún más este punto. “El mundo sigue adelante, incluso sin el liderazgo político y tecnológico de Estados Unidos”, señaló Scott Kennedy, asesor principal del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales.

El control de China sobre la cadena de suministro

El liderazgo de China en el mercado de vehículos eléctricos se extiende más allá de la fabricación. El país también ejerce un control significativo sobre las cadenas de suministro de minerales críticos : componentes esenciales para baterías de vehículos eléctricos de alto rendimiento. Tanto China como Estados Unidos están compitiendo por el acceso a estos minerales estratégicos, que abundan en Brasil y en toda América Latina. Este control le da a China una influencia considerable en el panorama mundial de los vehículos eléctricos.

Ampliando presencia en Brasil

Los fabricantes de automóviles chinos están haciendo planes ambiciosos para América Latina. Varios acontecimientos clave ilustran esta expansión:

  • Nuevas fábricas: El mes pasado, BYD inauguró su fábrica más grande fuera de Asia en el estado de Bahía, Brasil, asumiendo un sitio anteriormente operado por Ford.
  • Activos adquiridos: A principios de año, GWM adquirió una vasta planta que anteriormente era propiedad de Mercedes-Benz, lo que demuestra un compromiso con una importante capacidad de producción.
  • Cuota de mercado: Los vehículos eléctricos chinos representan más del 80% de las ventas de vehículos eléctricos en Brasil, lo que destaca su rápida penetración en el mercado.

Un impacto visible en las ciudades brasileñas

La integración de los vehículos eléctricos ya es evidente en las ciudades brasileñas, incluida Belém, la ciudad anfitriona de la COP30 y un bullicioso puerto con una población de 1,3 millones que frecuentemente experimenta congestión de tráfico. El cambio hacia la movilidad eléctrica está preparado para aliviar el tráfico y mejorar la calidad del aire, respaldando los objetivos más amplios de sostenibilidad de Brasil.

En conclusión, la elección de Brasil como medio de transporte para la COP30 es un poderoso símbolo del ascenso de China como líder mundial en tecnología de vehículos eléctricos y de un cambio en las alianzas estratégicas de América Latina. El evento subraya la creciente influencia de China en el sector automotriz de Brasil y su compromiso de ampliar su presencia en la región. Esta tendencia señala un nuevo capítulo importante en la transición global hacia la movilidad eléctrica y tiene implicaciones para el equilibrio de poder en la economía verde emergente.